Una caída en la demanda de metanol está obligando a los Estados Unidos a impulsar más cargas de metanol a Asia y Europa. Por ello, Drewry espera que las tarifas de carga para los petroleros MR2 recubiertos mejoren en ambas rutas.
La pandemia de coronavirus (Covid-19) ha golpeado a la economía mundial más fuerte de lo esperado con países que aplican diversos grados de bloqueo para evitar su propagación. Estados Unidos no es una excepción, ya que la débil actividad industrial daña la demanda interna de metanol. El país es un importador neto de metanol y en el primer trimestre de 2020 importó 690.000 toneladas del producto, un aumento del 18% con respecto al cuarto trimestre de 2019. Sin embargo, la débil demanda interna en el segundo trimestre de 2020 junto con el aumento de los inventarios está obligando a los productores estadounidenses a exportar metanol a Asia y Europa. En consecuencia, se espera que las tarifas de carga para los buques tanque MR2 recubiertos aumenten en estas rutas, ya que esta tendencia continuará en el resto de 2020.
El metanol se usa principalmente en la producción de formaldehído, éter metil tert-butílico (MTBE) y ácido acético. A su vez, el formaldehído se usa en la fabricación de resinas y pegamentos para productos de madera, con aplicaciones finales en los sectores automotriz y de vivienda. La producción de formaldehído en los Estados Unidos es entre un 10% y un 30% más baja de lo habitual debido a la anulada actividad económica en los sectores automotriz y de vivienda.
El metanol también se usa como materia prima en la producción de MTBE, que es un aditivo de gasolina. La producción estadounidense de MTBE se ha desplomado en más del 50% debido a la débil demanda de gasolina mezclada en medio de restricciones de movimiento para frenar la propagación del virus. Las exportaciones estadounidenses de MTBE también cayeron un 26% en el primer trimestre de 2020 en comparación con el cuarto trimestre de 2019 a 535.030 toneladas, con caídas del 11% y 50% en el volumen de exportaciones a Japón y México, respectivamente.
La industria del ácido acético también se ha visto afectada por la menor demanda en Estados Unidos donde la producción ha disminuido en un 50% debido a la débil demanda de polímeros. Celanese, un fabricante de productos químicos con sede en Texas, ha aplazado la construcción de una nueva unidad de producción de ácido acético en 18 meses.
En medio de estas condiciones, Estados Unidos está exportando mayores cantidades de metanol a Corea del Sur, los Países Bajos y Taiwán. Por ejemplo, Estados Unidos exportó 558.000 toneladas de metanol en el primer trimestre de 2020, 38% más que en el mismo periodo de 2019 y 56% más que en el cuarto trimestre de 2019. De esto, la mayor parte – 300.300 toneladas – se exportó en marzo, un aumento masivo del 167% en las exportaciones respecto a febrero. Drewry espera que este aumento prevalezca en los meses restantes de 2020, con exportaciones de metanol estadounidenses que alcanzarán aproximadamente 630.000 toneladas en el segundo trimestre de 2020. Poco más del 50% de estas exportaciones fueron a Europa y un 20% adicional a Asia. Este aumento de las exportaciones a estos destinos se puede atribuir al hecho de que la recuperación económica en Europa y Asia está avanzando a un ritmo más rápido que en Estados Unidos.
Como resultado de estos desarrollos, Drewry aguarda que las tarifas de flete para los petroleros MR recubiertos mejoren en las rutas de Estados Unidos – Noreste de Asia y Estados Unidos – Noroeste de Europa en los meses restantes de 2020, ya que son los petroleros preferidos para el envío de metanol. Mientras tanto, el escaso suministro de capacidad MR continuará en el mercado transporte marítimo de productos químicos de larga distancia en medio de un mercado boyante de CPP.
Por MundoMarítimo
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